13 de Abril del 2011, A las 9.30 h., salimos en autocar hacia Berlanga del Duero, al sur, rodeada de matas de pinares, capital de una comarca de transición entre las serranías del sistema central y la Rivera y siendo el primer pueblo del alto Duero donde se cultivan viñas, encontramos la villa de Berlanga de Duero, resultó uno de los lugares más bellos e interesantes de toda la provincia de Soria, declarada Conjunto Histórico-Artístico, coronada por un magnífico castillo.
Fuimos a ver la Colegiata de Santa María del Mercado, Monumento Nacional del el año 1931, fue construida en cuatro años (1526-1530)pagada por los Duques de Frías, ellos son los responsables de la desaparición de seis iglesias románicas que tenía la villa, y que desmontaron para construir esa gran Colegiata, que era más grandiosa en el proyecto original, con claustro y otra torre, que no pudieron construir por problemas económicos de los mecenas. Su planta es del tipo llamado lonja, con tres naves centrales elevadísimas y crucero; fuertes columnas cilíndricas sostiene las bóvedas., de rica tracería, el Altar Mayor está presidido por la talla de Nuestra Señora del Mercado, del siglo XII, enterramientos de nobles en alabastro y la capilla del obispo de Panamá, Fray Tomás de Berlanga, figura universal del renacimiento, consejero de reyes, descubridor de las Galápagos, (se trajo la piel de un caimán, colgado en la pared al entrar a mano derecha) dominico nacido en Berlanga.
En la máxima altura llamado, "El coborrón", se asienta el CASTILLO de Berlanga del Duero, fue construido en el Siglo XV, sobre otro anterior, y éste sobre otro musulmán.Ascendiendo por una ladera subimos a verlo por dentro. Está formado por gruesos muros, rodeando una esbelta torre del homenaje, no tiene techos, se ven unas vistas preciosas de las laderas y pueblo, en la falda del Castillo aparece la fachada principal del que fue suntuosos palacio de los Marqueses de Berlanga, se conservan restos de dos cercas, una de ellas rodeaba la villa nueva y de ésta se conserva la Puerta de Aguilera, en la que puede verse, coronando la entrada, una concha del peregrino,Enfrente a ella fuimos a ver la ermita de las Torres, alberga la imagen del mismo nombre, por la que los berlangueses sienten veneración. Esta ermita formaba parte del Hospital de peregrinos, del que solo se conserva la enorme chimenea alrededor de la cual se reunían los peregrinos para comer una sopa, calentarse y curarse.
PICOTA DE BERLANGA, o "rollo gótico", se alza majestuoso, dicen que el ejemplar más bello y mejor conservado de toda la provincia, sólo desdice su ubicación, en su día el emblema sería visto desde todos los lugares, pero con el discurrir del tiempo se ha edificado alrededor, escondiéndolo a la vista del visitante, se alzó para decir a todo el pasara, de quien era la villa, a quién se debía respeto y obediencia, quién imponía y ejecutaba la ley, y, en definitiva, a quienes debían pagar sus impuestos.
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